Todos los hombres que amé en mi vida son Sanson
Pero tú no eres hombre, tú no eres Sanson...tú eres Frida
Te vistes de hombre pero realmente tienes vagina
Y sucede que perderme a mi es para ti también perder esa larga cabellera
Ese elemento que es siempre el tercero en la relación
Nuestro objeto de fantasía que suspende el tiempo
Nuestro amante enmarañado con olor al sexo del otro
Hoy tu cabello se aleja de ti entregandose al piso que le acoge con dolor
Posteriormente se retorcerá en la bolsa hambrienta de muerte
e irá a parar al basurero decepcionado de tu falta de amor
El mio en cambio sobrevive a regañadientes
Resistiendose con todas sus fuerzas a morir intoxicado en agua oxigenada
Mientras de su agonía brota la sangre insolente que en mechas indecentes
Va cayendo; entrópica pero dignamente, sobre él.
No puedo dejar de pensar en que el cabello sigue vivo despues de la muerte
¿Será que la fantasía se resiste a abandonar aquel cuerpo innerte que es la realidad?
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