lunes, 7 de septiembre de 2009

Amor



He conocido personas en mi vida, personas que piensan que con sentir algo intenso en el corazón es suficiente para levantar un altar sobre este sentimiento y dar curso a los actos más egoístas imaginables (e inimaginables también) en el nombre de eso que llaman amor.

Yo se bien que eso no es amor, ni mucho menos amar.
No soy de aquellos que pretenden dar cátedra sobre el significado de aquella palabra tan manoseada, respeto las opiniones ajenas, pero por ningún motivo daré mi favor a esas personas que hacen del miedo un apogeo de la odiosidad.
"Esa no es la forma de mi corazón"

Yo no creo en las palabras bellas que no van acompañadas de actos.
Yo no creo en los actos que simulan ser heroicos y quijotescos, si la intención que está detrás de ellos se mantiene oculta.
Creo en la sinceridad del alma, cuando los actos no son forzados pero requieren de esfuerzo, cuando las palabras no son todo el tiempo dulces, pero son honestas.
Es ahí cuando la belleza de la retórica cobra sentido, y entonces sí puedo prestar oído a ese trinar.

No existe tal cosa cómo el amor incondicional, cuando se guarda el egoísmo propio detrás de una máscara cínica y sonriente.
No existe tal cosa cómo el amor universal, cuando no se cuidan las flores del propio jardín.
Y no existe nadie capaz de enseñar a otro cual es la forma correcta de amar, si tropieza en su discurso con palabras carentes de benevolencia.

Yo no soy la persona idonea para decir esto. Soy alguien que ha cometido muchos errores en la vida, pero he aprendido un par de cosas que me parecen importantes, la primera es que hay que saber perder para poder ganar, y la segunda es que el amor es en parte corazón y en parte decisión, es la única forma de sentirlo y vivirlo a la vez. Con egoísmo compartido, con desinterés compartido, con seguridad en uno mismo y plena confianza en el otro.
Si sólo vive en nuestros corazones: se pudre. Si sólo existe en nuestras decisiones: se marchita.

Y no importa cuan bellos sean tus sentimientos, ni cuan firme tu decisión.

Si no van de la mano no tiene sentido defender su causa.

7 comentarios:

Miguel dijo...

leer y sentir tus palabras me convencen que comparto mi vida con una mujer joven pero que posee un alma vieja y sabia,,, TE AMO


sabes cuando mis sentimientos eclipsaron mi razon,,,apareces tu..mezcla de sentimientos y razon,,,y afloro mi esencia,,,,

Moonchild dijo...

Eso explica porqué la frase nunca estuvo terminada (para ninguno de los dos)
Tú...me completas.
Te amo.

Un Mono Mas dijo...

Sencillamente increíble su texto.

Nada que agregar. También me hace sentir orgulloso ser su amigo. Gozas de una lucidez y exactitud en tus palabras, y que conociéndole uno ve claramente en sus actos.

Abrazo y beso.

Andaya dijo...

Me he atrevido a enlazar este texto en mi face. Si te molesta, o prefieres que no lo haga, solo tienes que decírmelo. Pero es que suscribo palabra por palabra cuanto dices y de cómo lo dices.

Kamar dijo...

Amiga amo tu precisión del saber...
Me fascina tu honestidad y la manera en que vives con ella.

Nada que decir, cada palabra de tu texto es exacta, el amor como bien dices, es una decisión como también un sentimiento... (Eso me recuerda la escena de closer, cuando la Natalie portman le recrimina precisamente eso a jud law...)
Para amar hay que tener cojones! Una tarea hermosa diría, de bueno, de todo lo que haz nombrado…

Te quieroo bella!!!
Y feliz que hayas encontrado tu complemento ^^

Un Mono Mas dijo...

no había reparado en que la imagen que usaste en el posteo es la de Eros y Psique. :D

meditaré mejor el párrafo que me indicó, aún tengo en mente el cuento del ejército de mujeres y cuales fueron los soldados más valiosos en el entrenamiento.

"quién a hierro mata a hierro muere."

abrazo Elfa del Viento y uno más grande al Enano Azul.

PD: y el otro posteo cuando? :P

HADALUNA dijo...

Me ha encantado leerte.
Palabras ciertas y certeras.
No hay más que decir.

Besitos de fin de semana.