Es increíble que este blog lleve diez años, aunque en realidad son doce, ya que hubo uno anterior del cuál exporté el contenido. Este post lo publiqué en el 2006, unos meses después de conocer, gracias a un gran amigo, a la leyenda, Nick Drake, quien durante muchos años se transformaría en mi cantautor favorito.
https://aprendedelviento.blogspot.cl/2008/08/el-viento-que-movi-las-hojas-de-mi-otoo.html
Durante esta década he seguido conociendo música que se ha hecho parte de mi corazón y ha compuesto el soundtrack de mi vida, entre esta música se encuentra Jeff Buckley, Regina Spektor, Alain Johannes, Sixto Rodriguez, Bunbury, Mon Laferte, y algunos otros. Pero si hay alguien que supo cautivar por completo cada fibra de mí, que supo tocar las cuerdas de mi corazón hasta lo profundo, llegando incluso a destronar a Nick Drake, es Will Knox.
Conocí a Will Knox gracias a mi amor, quien lo conoció gracias a una clase de YouTube que realizó Fab Dupont (increíble productor) para sus alumnos en París. Me gustó la canción en la que estaban trabajando, The Ship and the Storm, y lo busqué en Spotify. Meses después de eso, ya era parte de la música de la casa, especialmente durante el proceso de nuestro embarazo, y luego en el nacimiento de nuestra bebé, y ahora aquí, en la madrugada, mientras la vemos crecer.
Hace un par de semanas atrás, mi amor tuvo la fortuna de entrevistarlo para su podcast y yo tuve la suerte de oficiar como traductora. Porque la vida es bonita y los sueños se cumplen, incluso los más locos, conversamos con él y nos reímos con él.
Dejo aquí la entrevista
Así, en diez años más, cuando este blog cumpla veinte años, la veré y sonreiré como idiota, de nuevo.
https://www.spreaker.com/user/diegovillacer1/will-knox2
Ahhh, y una de las cosas más lindas de todas, es que pude preguntarle sobre un hidden track de su primer álbum, dedicado a Nick Drake en dónde dice Born with a skin too few, como el documental ❤️